Escribe: María Ynés Aragonez
Un drama que toca lo más íntimo de las relaciones familiares y da cuenta que los buenos deseos o las supersticiones no pueden sanar las relaciones rotas. Este es el argumento de ‘Suerte qué está por venir’.
La obra, de la dramaturga argentina Isabel Sala, es dirigida por Manuel Alegría, quien ha logrado recrear el ambiente de tensión u ‘olla de presión’ que se vive en un hogar donde ya no existe afinidad y que puede estallar en cualquier momento.
Katia Salazar, Renato Pantigozo y Jade Durán dan vida a una familia que se cae a pedazos y que sigue ‘unida’ bajo el pretexto de la tranquilidad de su hija, un argumento falso que ya no les sirve para seguir unidos.
En el mismo escenario se plantea –como salvación– la búsqueda de la suerte o las supersticiones: la esposa supone que el quiebre es un caso de ‘mala suerte’ y ella está a la espera de la ‘Suerte que está por venir’.
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Intriga y desenlace
El director precisa: “El texto de la obra me atrajo en la medida que siempre me interesa ver qué sucede con las relaciones familiares, con los vínculos y cuándo hay algo que hace que todo empiece a desmoronarse”.
Alegría precisa que se trata de un drama que tiene al público intrigado por conocer el desenlace, luego de destaparse “la gran verdad” de la necesidad o el deseo del divorcio. La historia muestra cómo, a partir de ese desencadenante trágico, los personajes esperan que la verdad crezca.
‘Suerte que está por venir’ ha sido montada por Sorpréndete Producciones y se presenta todos los sábados y domingos de agosto, hasta el 27, en el Club de Teatro de Lima (avenida 28 de julio 183, Miraflores).
Las funciones comienzan a las 7:00 de la noche. Las entradas están a la venta en Joinnus y Atrápalo, en el WhatsApp 985 709 702 y en el Instagram @sorprendeteproducciones.
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De extremo a extremo
El director señala que, en esta ocasión, quiso explorar el drama porque su estreno anterior fue una comedia ‘muy negra’. “Entonces, quería irme hacia otro lado, no seguir en lo mismo, porque creo que vas aprendiendo mucho pasando por distintos géneros”.
En cada proceso se aprende de forma distinta y el reto sigue siendo atraer al público, crear audiencias y lograr que las personas lleguen al teatro, explica.
Alegría observa que hay mucha oferta cultural con la presencia de la Feria Internacional del Libro y el Festival de Cine de Lima y es importante que el público pruebe y experimente espacios diferentes. En su opinión, el teatro es un arte que tiene como valor agregado la interacción con el público.
“Hay que ir a la Feria del Libro, hay que ir al Festival de Cine y también hay que venir a ver teatro –remarca–. Lo bonito del teatro es que está sucediendo en vivo, está sucediendo ante nuestros ojos y cada noche es irrepetible”.
(FIN /Ensayo General)