Escribe: Aracely Alejos
Tiempos futuros (The shape of things to come) es una película peruana ambientada en una Lima distópica, una ciudad gris y casi fantasmal donde nunca llueve, una particularidad que la define y sumerge en la nostalgia y la melancolía, relata su director, Víctor Checa.
Este largometraje, cargado de metáforas y simbolismo, juega con el género de la ciencia ficción, agregándole pequeñas dosis de tensión y thriller.
“Uno ve la película y se da cuenta de que es un juego de precisiones”, comenta Javier Salvador, productor del filme, en un video compartido en el sitio de Tiempos futuros en Facebook. “Trabajando con un meteorólogo y un ingeniero mecatrónico, terminamos armando una tesis de 60 páginas sobre la posibilidad de una máquina que haga llover en Lima”.
Una atmósfera sin tiempo
En su ópera prima, Checa crea una atmósfera atemporal que sirve de telón de fondo para conocer a los protagonistas.
Luis es un hombre obsesionado con la construcción de una máquina para crear lluvia –interpretado por el actor trujillano Fernando Bacilio– y Teo (Lorenzo Molina), un niño audaz que vive con su padre en un edificio y tiene como mascotas a un grupo de ranas, anfibio capaz de predecir lluvias.
A lo largo del filme, vemos la evolución y transformación de esta relación que va cambiando a causa del intenso vínculo entre la máquina y Luis, quien le cede más espacio en la casa, como si fuera un tentáculo, agudizando así el distanciamiento entre padre e hijo.
«La máquina tenía que ser un personaje y formar parte de la vida de los protagonistas; ese fue un punto de partida importante. Queríamos lograr una dualidad entre lo bello y lo siniestro: partes de la máquina iban a ir ganando y ganando territorio y desplazando un poco a los personajes», explica el director de arte, Sandro Angobaldo.
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‘La banda’
A este entretejido familiar se suman Raiza –Paulina Bazán–, Baca –Jeremí García– y Haya –José Flores– apodados como ‘La banda’, un grupo de jóvenes que trabajan fabricando diminutas cámaras en forma de escarabajos que instalan en distintas casas de la metrópoli.
Baca, el líder de este equipo dedicado al negocio del espionaje, ve con buenos ojos a Teo, un chico hábil, y rápidamente lo integra al grupo.
«Al final todo se basaba en la máquina y cómo va mutando. La película y la música, todo va mutando con esa personalidad que va logrando la máquina, que al principio empieza como fría y, al final, se vuelve mucho más orgánica y potente», agrega José Tena, compositor musical.
Tiempos futuros: filmar en pandemia
Tiempos futuros se filmó en pandemia, en el 2020, en largas jornadas nocturnas y de madrugada, tras un casting que tomó año y medio. Los productores realizaron convocatorias en distintos colegios y aplicaron diversos talleres para que los actores tuvieran las herramientas necesarias.
Este filme –una coproducción entre Perú, México, Ecuador, España y Alemania–llegó a la cartelera local en noviembre tras su paso por diversos festivales de cine. Además, ha ganado premios a la producción de largometraje del Ministerio de Cultura (Dafo), a la coproducción Iberoamericana (Ibermedia) y a la distribución del Festival de Cine de Málaga, entre otros.
(FIN/Ensayo General)
Tiempos futuros: selección de premios y festivales
- Selección oficial Festival de Cine Tallinn Black Nights.
- Selección oficial Festival de Cine de Málaga.
- Selección oficial Festival de Cine D’A de Barcelona.
- Selección oficial Festival de Cine de Guadalajara.
- Selección oficial Festival de Cine Latino de Los Ángeles.
- Selección oficial Festival de Cine Fantástico de Bilbao.
- Selección oficial Festival Fantástico de Cine Neuchatel.
