El Fondo de Ayudas para las Artes Escénicas Iberoamericanas (Iberescena) se ha convertido en una oportunidad para unir culturas –las de Latinoamérica y España– con puestas en escena que combinan el teatro y el activismo.
Creado en noviembre de 2006, son 17 años durante los cuales Iberescena ha promovido el intercambio, la creación y la profesionalización de las artes escénicas, alineando sus acciones a la Agenda 2030.
Ibescena ofrece ayudas a la Creación en Residencia, a la Coproducción de Espectáculos de Artes Escénicas y a la Programación de Festivales y Espacios Escénicos. Las convocatorias para América Latina se dan a mediados de cada año.
En el período 2022-2023, la obra ganadora en el Perú fue ‘La selva de Miranda’, una versión de La Tempestad de William Shakespeare. La puesta en escena fue liderada por la directora española María Caudevilla y presentada en el Centro Cultural de la Universidad del Pacífico.
María Caudevilla confiesa que fue un reto dirigir una obra “entre dos continentes”, pero que el profesionalismo del equipo le permitió hacer el montaje de un clásico con una mirada femenina.
“¿Qué ocurre cuando la historia la escribe una adolescente criada al abrigo del monte amazónico? El cuento, inevitablemente, cambia. No los hechos, sino la forma en que son vividos. Del mismo modo que nombrar las estrellas no cambia el firmamento, pero sí la manera en que leemos la oscura noche de los tiempos”, sostiene la directora.
>> PARA LEER EN RED >> Fondo Editorial de la UCV lanza red de clubes de lectura ‘Vallejo Lee’ en 16 sedes
‘La selva de Miranda’
Un sonido de olas, lluvia, viento y remolinos prepara al espectador que ingresa a la sala del teatro de la Universidad del Pacífico para apreciar ‘La Selva de Miranda’. La obra estuvo a cargo de un elenco binacional formado por artistas de la Compañía Baraka Teatro de España y Colectivo del Bardo de Perú.
El argumento de ‘La selva de Miranda’ es una historia de amor que nace a partir de una terrible tormenta. Todo se desarrolla en una isla donde viven en el exilio Miranda, una joven princesa junto a su padre, un guerrero-mago llamado Próspero.
La princesa fue desterrada a los tres años de edad, junto a su padre, a una isla habitada por Calibán –un monstruo mitad pez, mitad hombre– y por espíritus de la selva. Calibán es dominado por la magia de Próspero.
>> PARA LEER EN RED >> Guitarrista Kike Yompian: La música es la expresión y materialización de la belleza
Convertida en una joven, Miranda logra conocer el amor luego de una gran tormenta que hace naufragar en la isla a los enemigos de su padre. A partir de allí la protagonista conocerá los secretos de su pasado.
La puesta en escena de este clásico shakesperiano logra que el escenario se llene de un ambiente mágico, la música y los diálogos le dan fuerza a cada uno de los personajes que demuestran entrega, pasión y hasta exhiben algunos toques de humor.
El elenco estuvo integrado por actores de ambos países: los reconocidos peruanos Miguel Iza, Manuel Gold, Alfonso Dibós y Eduardo Camino, y por la actriz española Paloma Rojas. La obra se presentó en sólo cuatro funciones en diciembre.
(FIN/Ensayo General)