En el catálogo de la muestra ‘Selva’, la mayoría de las esculturas de Silvia Westphalen en mármol travertino aparecen con una leyenda breve y modesta que deja margen para el criterio propio de quien las aprecia: Sin título, 2022. Quizás de manera intencional, la artista –nacida en Roma, en 1961– ha preferido que sea la propia piedra la que sugiera un nombre, en el libre albedrío de la relación obra-público.
Es domingo, Día del Trabajo, y Westphalen atiende a tres invitados en el Centro Cultural Inca Garcilaso del Ministerio de Relaciones Exteriores, en el centro histórico de Lima. La artista camina hacia la entrada de la sala para traer entre manos el tríptico donde Giulio San Giorgi ha escrito un texto potente para presentar los trabajos reunidos en ‘Selva’.
“Cuando la obra de una artista supera las palabras, se impone la contemplación silenciosa. El lenguaje –engañoso instrumento racional y estructurado– está lejos de descifrar la relación entre Silvia Westphalen y la piedra, ese mundo tan sutil y delicado”, afirma San Giorgi.
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La exposición ‘Selva’ va hasta el domingo 8 de mayo en el Centro Cultural Inca Garcilaso.
Libertad de interpretación
La artista se detiene junto a nosotros para alcanzarnos el catálogo. Sonríe desde detrás de su mascarilla y se da tiempo para explicar que el sábado 7 de mayo habrá una visita guiada. ¿Por qué ‘Selva’?, pregunto de inmediato, considerando que, para mí, las formas de sus trabajos me remiten más bien al mar. En jeans, sandalias, blusa blanca y una vincha que le recoge el cabello, Silvia Westphalen admite que sí, efectivamente, hay libertad para interpretar sus esculturas.
Señala entonces el fondo de la sala, un espacio particularmente oscuro donde tres esculturas de magnífico acabado –con un juego de iluminación que resalta el volumen de cada obra– dan la sensación de ser hojas brotando del corazón mismo de la roca. Como si se tratara de una materia suave, Westphalen ha escarbado la piedra para lograr láminas, pliegues delicados, curvas, profundidades y surcos que son el relato de su propia creación.
“La piedra, aparentemente implacable, se rinde, venerada, escuchada, ante las caricias de Westphalen –añade San Giorgi–. Tímidas, respetuosas, frágiles, ellas son, a la vez, determinadas y firmes, y tornan en colisión cósmica, potencia y fertilidad. Es la alquimia entre el artista y la materia”.
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‘Selva’
Esculturas de Silvia Westphalen
Hasta el domingo 8 de mayo de 2022
Centro Cultural Inca Garcilaso / Jr. Ucayali 391, Lima.
Martes a viernes: 10:00 a.m. a 8:00 p.m.
Sábados, domingos y feriados: 10:00 a.m. a 6:00 p.m.
Ingreso libre.
Presentar carnet de vacunación con esquema completo y DNI.
Usar mascarilla.
(FIN/Ensayo General)
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🎭Sexo y liberación en la lucha continua por la igualdad.
— Ensayo General (@Ensayo_General) May 4, 2022
🟣Féminas va todos los viernes hasta el 27 de mayo en el teatro Barranco, a las 8:00 de la noche.
Dirige Ramón Garcíahttps://t.co/yG7x3zWFTi#RevistaCultural pic.twitter.com/Y57I9QkVcL